Mensajes de Nuestra Señora – María, Llena de Gracia
El Adviento del nuevo mundo - Palabras de Nuestra
Señora
El último tiempo de mensajes para la humanidad
19 de noviembre de 2017
En esta hermosa mañana el Señor viene a alimentaros con Su Santa Palabra, para que tengáis Vida Eternamente.
La Palabra de Dios es Salvación, Ella transforma los corazones, especialmente los endurecidos, los que se humillan para mejorar.
La Palabra de Dios está sobre el mundo, para que todos
crezcan en sabiduría y valoren más la vida que tienen.
La Palabra cura todas las fallas humanas.
Por lo tanto, es grande Mi alegría en poder aún estar con vosotros, para traer a cada hijo el Mensaje de Dios.
Es necesario que todos despierten y escuchen el Llamado de Dios.
Es tiempo de enderezar vuestros pasos. El tiempo doloroso se acerca y vosotros estáis en rejilla peligro. El peligro ya está en el mundo desde la creación del ser humano, el peligro es el Pecado. Él es el causante de todos los peligros, el hambre, pestes, sed, guerras y la oscuridad. Convertíos, convertíos, antes que sea tarde.
Queridos y amados hijos de mi Inmaculado Corazón, os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, que os ilumina conduciéndoles para siempre con su Luz.
Yo soy la Sierva del Señor, María, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo, el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo. Soy la Inmaculada Concepción de María. Yo soy la Mensajera de Dios y en el mensaje de hoy Él os agradece por su atención y también os alerta con más urgencia porque vosotros estáis ahora en gran peligro de fuertes acontecimientos.
El Señor os dice:
"Mis hijos, preparaos, vienen llegando a todos vosotros momentos de muchas dificultades. Vosotros habéis de querer que el tiempo pare, vuelva, porque tendréis aflicciones y miedo. Pero es necesario que vuestra purificación suceda para amar verdaderamente vuestra vida.
Vosotros no habéis valorado vuestra vida, porque os habéis apegado al pecado, os habéis hecho esclavos de él. Pero yo soy vuestro Dios, os doy todas las oportunidades que necesitáis para mejorar, pero las desprecias todas. Ahora os mostraré que depende solamente de vuestra renuncia al pecado para ser felices. Vosotros sólo seréis felices si os convertís.
Escuchad los últimos llamados que os hago, está llegando la hora de vuestra decisión.
Yo soy vuestro Dios, soy el que Soy y vosotros sois Mis hijos pecadores, rebeldes, desobedientes y duros de corazón. Pero Yo voy a transformar vuestras vidas de pecadores para hijos puros y santos, todos los que se conviertan a Mí.
Preparaos el tiempo de cambio en vuestra vida, ha llegado el momento en que Voy a limpiar toda la podredumbre de la humanidad."
Queridos hijos, unidos vamos a reflexionar las Palabra de Dios nuestro Padre Eterno, el Todopoderoso, que hoy una vez más os invita a acercaros más a Él, para recuperar la felicidad perdida por culpa de vuestros pecados. Vosotros corréis el peligro de perderla para siempre si no os convertís. Vosotros huís para no oír los Avisos del Cielo, pero no podéis huir de los acontecimientos.
Ahora vendrán terribles acontecimientos para despertaros.
Cada hijo tendrá que despertar y sentir el valor de la vida, solos no sois capaces de nada.
Por eso Dios Me envió en medio de vosotros para ayudaros y revelaros lo que debéis hacer para mejorar su situación ante Él.
Creed mis hijos en el Santo Evangelio y comprenderéis que estáis en la parte final de vuestro pasaje por la tierra.
Continuación II del mensaje del 19 de noviembre de 2017
Los acontecimientos están escritos en la Sagrada Escritura, vosotros veréis que no os habéis preparado como debéis prepararos. Ahora no tenéis más tiempo.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva a reflexionar sobre la hora que tendréis que rendir cuentas a Él de todo lo que hicisteis mal durante tu vida en la tierra, si trabajaste para vuestra vida mejorar o si fuiste omiso, a vuestra vida para entregarla a Dios.
Sabed Mis hijos, que el día del Señor ya está a las puertas de vuestros corazones. Dios os dio una vida para cuidar de ella y vosotros preferís perjudicarla, porque os habéis apegado al pecado y no os arrepentíos aún de esta culpa. No has buscado repararla.
Ahora vosotros estáis en un tiempo de más sufrimientos y no estáis buscando el consuelo.
Vosotros estáis viendo llegar las enfermedades
desconocidas por vosotros, estáis viendo el aumento de tantos sufrimientos y no
estáis preparándoos. Vosotros
veréis que descuidáis de vuestras vidas por motivos que el demonio pone delante
de vuestros ojos como si fuerais esclavos de él.
Pero Dios os socorre cada día, porque vosotros pertenecéis a Él. Cuanto más rezáis, más ayuda tendréis de Dios. Él os invita a ser observadores de vuestros actos y vosotros debéis valorar cada día más vuestra vida, no debéis practicar obras malas, practiquéis el bien, cuidado, vosotros estáis en gran peligro.
Valoréis las cosas correctas, no desprecies las oportunidades que tendréis todos los días para enderezaros. No juzguéis a nadie.
Vosotros ya estáis percibiendo que todo está en corrección y destrucción. La primera cosa es la fe, y caerá en la mayoría, después renacerá con más fuerza.
Los que llevan la vida en la individualidad y no hacen nada para mejorar el comportamiento delante de Dios, son los que se juzgan por encima de Dios, ellos no temen a Dios, no se preocupan por el alma.
Ahí viene el día del Señor, para todos, tanto para los
que pecan menos como para los que pecan más.
Ahora Dios viene a transformar el mundo y el hombre está peor que los del tiempo del diluvio. Cuánto sufrimiento y no perciben que son los pecados cometidos, cada uno con su peso de conciencia todos necesitan de Dios y nada más.
Vigilad y orad, la hora del Señor está cerca. Ahora ha llegado el momento de comprobar si estáis listos para encontrarse frente a frente con Dios.
Dónde están los talentos que habéis recibido, lo que habéis hecho de vuestra vida, dejáis para enderezarse a la hora de la muerte y puede ser que sea en cualquier momento de cualquier día, cualquier hora, cualquier minuto de un día. Lo que presentaréis a Dios: Yo os pregunto.
En verdad os digo. Vosotros
confiáis que la venida del Señor será de aquí a muchos y muchos años, pero no
lo será. Nadie
sabe a qué hora es sorprendido por Él y entonces vuestras manos están vacías de
buenas obras. Vosotros
habéis sido engañados: por las invenciones humanas, por las arrogancias, las
venganzas, las violencias, la vanidad, el irrespeto a Dios es total, los
corazones helados y todos los pecados. El
mundo atrajo gran castigo principalmente con la práctica del aborto, esto es
asesinato de inocente.
Ahora, muy breve, Dios va a soplar de una vez y por todas la debilidad humana y entonces veréis que vosotros pertenecéis a Él, sólo a Él y vosotros tendréis que obedecerlo.
A Dios tendréis que rendir cuentas de vuestros actos, tendréis que rendir cuentas de los talentos que Él os dio, son ellos los Dones del Espíritu Santo. Será la eliminación de la desobediencia. Entonces este es el momento en que el Cielo os está ayudando a limpiar el fango de vuestras vidas que es la desobediencia a Dios.
Vosotros sois aún pecadores, necesitáis pasar por el Fuego Sagrado para merecer la Salvación.
Os enderezará, ahí viene el día del Señor.
Preparaos hijos, vosotros ya estáis dentro del tiempo de las batallas finales y vosotros estáis queriendo volver vuestros corazones a Dios.
Pero sólo Él sabe cómo traerles a la realidad. Vosotros necesitáis desapegar de las cosas que no agradan a Dios y comenzar la nueva vida, la vida sólo en Dios. La ciencia humana está llena de fallas, pero la Ciencia Divina no se equivoca, Ella es perfectísima.
Esto es lo que vengo a revelaros hoy, para vuestra conversión.
Continuación III del mensaje del 19 de noviembre de 2017
Ahora os pido la Santa Misa, la Santa Eucaristía con fidelidad a Dios.
Rezad, rezad, rezad, por los dos santos Papas, Benedicto
XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda
la humanidad.
Rezad por los ateos y los paganos, por todos los que están todavía indecisos, el tiempo es corto, esforzaos para perseverar ayudando en la conversión de ellos, con oraciones.
Todos vamos a ayudarles con oraciones. Dios os dará la recompensa en el Cielo.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, todos rezando más ahora, vivid conforme a los Mandamientos que Dios os ha dado, conforme a Él os enseña, meditad sobre los pecados capitales.
Vigilad vuestro comportamiento, reparad vuestros pecados.
Vivid vigilando a vosotros mismos, no desprecies los días que Dios os da.
Vivid vigilando a vosotros mismos, no desprecies los días que Dios os da.
Todavía estáis en tiempo de enderezar tu manera de vivir.
Seáis puros Mis hijos, seáis santos. Valorizad cada día más esta vida que tenéis en vosotros, fue Dios quien os creó.
Ayudad a los Santos Papas a buscar las ovejas que están necesitando volver.
Yo os amo mucho y os llamo en todo momento porque el tiempo es corto y vosotros estáis en peligro.
Seáis fieles a Dios, fieles a vuestras familias, fieles a vuestros amigos, fieles a todos los hermanos en Jesucristo. Rezad por las almas, seáis buenos compañeros, seáis puros de corazón y dadles las manos.
Esta es la hora más difícil para la humanidad porque es hora de aumentar la fe para saber soportar lo que viene al mundo de aquí en adelante. Es necesario tener fe y su fe está del tamaño de un grano de arena.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Brasil, preparaos, peligro muy próximo para todo el país. Rezad el Santo Rosario con fe y esperanza.
Todas las naciones, cada día aumentando más las guerras y vosotros estáis acomodados, hay que abrir los ojos del alma y rezar más.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción
Gracias por corresponder al Llamado de Dios.
El tiempo está cada día más corto y vosotros no estáis listos para soportar lo que se acerca.
Apresuraos en vuestra conversión o no lograréis más.
Ved Mis hijos, que el tiempo está muy rápido y la mayor parte aún no ha tomado la decisión de acoger los Avisos del Cielo.
Todavía os ofrezco a Mi Inmaculado Corazón como refugio a la hora del gran castigo que se acerca al pecado, cuidéis de vuestras almas.
Con todo cariño y amor de Madre os deseo Paz y llevo a Dios vuestras peticiones.
La Paz de Nuestro Señor Jesucristo y
La Paz de Nuestro Señor Jesucristo esté con vosotros
ahora y para siempre. Amén. La Paz.
¡Paz! ¡Paz! ¡Paz! ¡Amén! ¡Amén! ¡Amén!
Bendito
sea Dios, Bendito sea su Santo Nombre.
Debéis reflexionar en el Santo Evangelio de hoy: Mateo 25,14-30
1ª lectura: Proverbios 31,10-13.19-20.30-31 o 14-15.19-21
2ª lectura: 1 Ts.5,1-6.
Mensajes de Nuestra Señora – María, Llena de Gracia
El Adviento del nuevo mundo - Palabras
de Nuestra Señora
El último tiempo de mensajes para la
humanidad
8 de noviembre de 2017
Queridos hijos, con mucho
amor y cariño vengo a bendeciros en el nombre del Padre y del Hijo y del Divino
Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, Me alegro de encontraros aquí en este lugar que Dios Me ha dado para realizar grandes cosas, para vuestro beneficio.
Vos obedeciendo a Dios están correspondiendo con vuestra participación en la obra que he Venido a realizar en este lugar.
No fuisteis vosotros que habéis elegido estar de rodillas para Ayudarme a derribar el mal que aún está por aquí muchas veces aumentando. Pero Dios os llamó y vosotros atendisteis. Todo padre le gusta la participación de los hijos en muchas cosas que van a hacer.
Así también Dios Padre le gusta ver a Sus hijos trabajando para la realización de la construcción de un mundo mejor. Cuanto más los hijos participan, más van siendo purificados y un día muy próximo podrán ser purificados y santificados si perseveran con el corazón lleno de amor e interés en la Salvación.
Es hermoso observar a Mis hijos pecadores buscando hacer algo que sea en beneficio para el mundo entero.
Entonces, vosotros estáis ahora rezando, dos personas muy queridas, con todos los defectos que tienen, pero que quisieron mejorar y ayudar a los que quieren cuidar del sembradío de Dios. Él plantó un jardín en la tierra, y este jardín se está secando, está pasando sed de comprensión porque son los hijos que existen, las flores más bellas de este jardín.
Mis hijos, vamos a limpiar la mala hierba que os está destruyendo, la desobediencia, la rebeldía, la falta de amor al prójimo y sobre todo a vosotros mismos, pues quien no ama está destruyendo su construcción. Es necesario cuidar del alma y crecer espiritualmente. Entonces vamos cada día a rezar para ser feliz, para alcanzar la Salvación.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a reflexionar sobre el amor. El mundo está muy enfermo, está siendo aplastado por el odio que está cada día ganando fuerza, porque se alejaron de Dios todos los que promueven guerras, sea en el mundo, sea en cada país, sea en familia.
Vamos a construir un mundo sólo de amor pero tendréis que vencer ahora las cosas más dolorosas, el hambre, la sed, las enfermedades y las guerras. Sólo junto a Dios podéis vencer. Solos no sois capaces de nada.
Si vosotros sabéis cómo la oración fortifica al hombre hasta cuando reza solo, piensa cuánto más fuertes seréis 2, 3 o más rezando juntos.
Experimentéis llevad Mi consejo en serio y veréis cómo podéis mejorar vuestra imagen ante Dios. Cuando te esfuerces, conseguiréis muchas cosas.
Esto es lo que vengo a revelaros hoy para vuestra conversión.
Rezad, rezad, rezad por los dos santos Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y los paganos, la hora se agrava, de aquí en adelante no desaniméis, ayudéis a vuestros hermanos, amor es ayudar a salvar almas y luchar por ellas, sin desanimar. Dios os dará la recompensa en el cielo.
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo, unión y oración. Ayudad a los santos Papas a buscar ovejas que aún están separadas, lejos de la Iglesia Verdadera que es Jesucristo, Él es la Iglesia y quien no Lo sigue está lejos de la Salvación.
Yo os amo mucho y os cubro con Mi Manto de Amor.
Continuación del mensaje del día 8 de noviembre de 2017
Brasil, estéis atentos, gran peligro de tormenta pueden ser suavizados si estáis unidos en oración. Entrad dentro de Mi Manto y rezad confiados que venceréis el miedo y la pérdida de cosas materiales. Dios os dará la recompensa, os dará el consuelo.
Todas las naciones, refuercen vuestros corazones, pues no tendréis fuerza si no rezáis más. Lo que viene al mundo es terrible. Rezad, rezad. Rezad en unión con la Santa Iglesia de Jesucristo, cada día que pasa más cerca esta del sufrimiento mundial.
Ahora os bendigo en el Nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción
Debéis reflexionar sobre el Santo Evangelio de hoy: Lucas 14,25-33 - lectura: Romanos 13,8-10
Mensajes de Nuestra Señora – María,
Llena de Gracia
El Adviento del nuevo mundo - Palabras
de Nuestra Señora
El último tiempo de mensajes para la
humanidad
4 de noviembre de 2017
Queridos hijos, con mucho amor y cariño vengo a bendeciros en el nombre del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo.
Unidos a la Santísima Trinidad, vamos juntos a buscar la verdadera Paz para el mundo.
Mis hijos, Me alegro de encontraros aquí reunidos para juntos rezar ante Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo.
Aquí están los Santos y Ángeles, vamos a pedir a Dios alivio para todas las almas que están en el Purgatorio pagando sus penas, por no haber cuidado mejor de sus almas mientras vivían en la tierra.
Pobres almas, cuánto desean entrar por la Puerta del Cielo, pero no repararon gran parte de sus culpas mientras estaban en la tierra y ahora quedan ansiosas para poder ver a Dios. Tendrán que esperar, muchas de ellas, sólo en el día del Juicio Final tendrán la felicidad de la liberación.
Mis hijos, también esta semana tuvisteis un día para rezar por las almas de vuestros muertos en el cementerio y todos los lugares donde pasaron el tiempo de pecado en la tierra. ¡Qué bueno que muchos hicieron oraciones por las almas de sus parientes y amigos! Esto también disminuye vuestras penas.
Rezasteis también en el día dedicado a todos los Santos, ellos agradecen vuestras oraciones y también todos los fieles difuntos. Fue hermoso ver de cerca todo lo que hicisteis. Es señal que estáis progresando, aunque la mayor parte no se mueve para rendir ningún homenaje, ni ofrecer oraciones a nadie.
Mis hijos, la Santa Palabra de Dios os lleva hoy a reflexionar sobre las cosas que Dios no aprueba en el pecador.
¿Cuántos hijos están todavía en la vanidad, en la indiferencia, se juzgan superiores a los hermanos y no se preocupan por el castigo que están atrayendo hacia el mundo. Dios es el Padre que sabe corregir a los hijos, Él no golpea, no acusa, no pone la vida en riesgo, al contrario Él cuida de cada uno, Él es quien sabe amar verdaderamente.
Entonces la humanidad está siendo llamada a poner la mano en la masa, que quiere decir, construir un mundo más hermano, sin hambre, sin sed, sin guerra. Dios quiere que todos sean felices para eso envió ayuda del Cielo para todos. Cada hijo sólo necesita cultivar dentro de su corazón la humildad, la armonía y principalmente plantar en el mundo entero la unión.
Es necesario vencer el pecado y ser realmente un hijo que escucha la Voluntad de Dios y vive feliz, confiando que nada les ha de faltar.
Vamos hijos, ayudar a limpiar la suciedad de la tierra. Son los pecados los causantes de toda esta desigualdad, del hambre, de la sed y de la enfermedad que se extiende cada día más.
Vos hijos, debéis de aquí en adelante echar agua bendita en vuestras casas, en los alimentos y en las puertas de vuestras casas. Verán cosas horribles en el mundo porque el hombre se burló de la Palabra de Dios.
Y en este fin de año todavía veréis muchas cosas tristes, sosténganse firmes en las Manos de Dios, vosotros no sabéis lo que está acercándose. Rezad, rezad cada día más, porque más de dos tercios de la humanidad aún no reza.
Brasil está en gran peligro, pero si ustedes levantan vuestros corazones a Dios, saldrán victoriosos.
Esto es lo que vengo a
revelaros hoy para vuestra conversión.
Rezad, rezad, rezad por los Santos Papas, Benedicto XVI y Francisco, por todo el Clero, por los religiosos y religiosas, por toda la humanidad.
Rezad por los ateos y los paganos, está terminando el tiempo de conversión a través del amor. Quien no se apresure, va a perder la Felicidad que está a la espera de los que se convierten. Dios os dará la recompensa.
Continuación del mensaje del día 4 de noviembre de 2017
Rezad por la Santa Iglesia fundada por Jesucristo. Cuando llegue, cantéis un himno de amor y os alegraréis porque caerán las cadenas del pecado. Rezad a mis hijos, seáis un solo pueblo, el pueblo que lucha por un mundo mejor.
Ayudéis a los Santos Papas a buscar las ovejas que están distantes.
La tarde se acerca. Dios quiere que todos los hijos se preparen para vencer.
Yo os amo mucho y os cubro
con Mi Manto de Amor.
Brasil, vienen a grandes tempestades, mucho cuidado con los niños. Rezad todos los días.
Todas las naciones,
preparad, la guerra mundial no será el mayor peligro, porque también del
espacio vendrán cosas.
Ahora os doy las gracias por haber venido al Llamado que el Padre os hace todos los días, rezad.
Puede llegar el día cuando nadie esté rezando, pero vuestras oraciones de ahora os protegerán mucho.
Ahora os bendigo en el Nombre
del Padre y del Hijo y del Divino Espíritu Santo, la Madre de Jesucristo, el
Salvador del mundo,
María, la Inmaculada Concepción
Debéis reflexionar sobre el Santo Evangelio de hoy: Lc.14,1.7-11 - Lectura: Rm.11.1-2a.11-12.25-29
A los que Me pidieron bendición para los enfermos y amigos, para las almas y para los cuerpos, yo los bendeciréis en los lechos y en los lugares donde están.
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